000 | 01389nam a22002057a 4500 | ||
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999 |
_c10709 _d10709 |
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008 | 250114b ||||| |||| 00| 0 esp d | ||
040 | _cBADP | ||
082 | _a923.272/ B467l T. II | ||
100 |
_97112 _aBenitez, Fernando _eaut. |
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245 |
_aLázaro Cárdenas y la Revolucion Mexicana: _bII. El caudillismo |
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260 |
_aMexico: _bFondo de Cultura Economica, _c1977 |
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300 | _a255 p. | ||
440 |
_97678 _aBiblioteca Joven _p II |
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505 | _aCárdenas: infancia y juventud de un soldado revolucionario. Carranza: una testarudez y un estilo cesáreo de gobierno. Obregón: el educador y el ángel exterminador del ejército. Calles: avances capitalistas y retrocesos dictatoriales. El Maximato, un intento de gobernar a trasmano. | ||
520 | _aLa palabra caudillo comenzó a utilizarse en español en su forma actual en el siglo XIV. Deriva del latin capitellum, cabecilla, y se da este nombre al jefe de una partida rebelde. Muchos y conocidos caudillos surgieron durante la Revolución Mexicana y, a lo largo de su curso, fueron exterminándose entre ellos. Martín Luis Guzmán sintetiza en una sola figura al vencedor El Caudillo tenía unos soberbios ojos de tigre, ojos cuyos reflejos dorados hacían juego con él desorden, algo tempestuoso, de su bigote gris." | ||
653 | _aHISTORIA | ||
653 | _aMOVIMIENTO REVOLUCIONARIO | ||
653 | _aCIENCIAS POLITICAS | ||
942 |
_2ddc _cBK |